Parece increíble pero en ocasiones
sucede. A diez minutos del final íbamos ganando el partido
gracias al tempranero gol de Braulio. Pero Farinós primero y
Trezeguet después se encargaron de darle la vuelta al
marcador.
Entre el partido del Racing y el del
Hércules hemos perdido una oportunidad de oro de alejarnos
de los puestos de descenso. Ahora volvemos a estar al borde
del abismo y con la imperiosa necesidad de ganar al Atlético
de Madrid el próximo sábado en la Romareda.